lunes, 13 de junio de 2011

LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD SU ORIGEN

Cuando una persona es diagnosticada de trastorno de personalidad conocer el origen exacto de la combinación de variables que lo desencadenaron se asemeja a una red compleja en la que es difícil determinar las causas originarias.
Obviamente en las terapias que la persona realice afloraran a la consciencia cuestiones que la persona experimentó o experimenta y que evidenciaran un conflicto intrapsiquico cuya desadaptación, resultante del trastorno, es producto del conjunto de síntomas propios del trastorno.
En principio los factores constitucionales, biológicos, genéticos, temperamentales pueden tener influencia en esa red compleja que interviene en el origen de un trastorno de la personalidad, estos factores constituyen una tendencia que acompaña al individuo toda la vida
La influencia del aprendizaje familiar es medular, este el que reforzara ciertas respuestas de la persona e influirá en su clima interno .
El clima familiar es la resultante de la convergencia de los climas de las personas que la integran, las vivencias familiares intervienen en la dinámica interna de cada integrante y la calidad de sus pensamientos, sentimientos y emociones presentes y reciprocas  genera un clima de conjunto que es donde esta inmerso el niño y al cual le provoca un impacto interno. Si este clima es de calidad negativa obviamente predispondrá una facilidad para asimilarlo o producirá un impacto doloroso que puede gradualmente constituirse en un trauma que afecte su personalidad.        
También pueden intervenir aspectos transpersonales o espirituales, los seres humanos no somos maquinas y si ponemos como ejemplo el caso de dos gemelos, estos pueden tener condiciones de temperamento, condiciones genéticas, crianzas y experiencias sociales análogas. Sin embargo tener personalidades distintas o hasta desarrollarse patologías en uno de ellos y no en el otro. Cada uno percibirá al hermano de forma distinta e incluso a sus familiares y al clima familiar e incluso responderán distinto en sus experiencias personales.  De la construcción de la personalidad y el porque de su constitución especifica se conocen los factores que contribuyen, pero existen aspectos que están fuera de lo psíquico y que pueden influir con mayor intensidad.

Respecto a todo el conjunto de vivencias personales que una persona pueda experimentar podemos destacar dos factores de importancia:
·       La dinámica interna de la personalidad, conformada por los pensamientos, sentimientos y emociones presentes en la persona y el equilibrio entre las influencias temperamentales e instintivas o procesos inferiores y los procesos superiores del razonamiento.  
·        El mundo o clima interior que es resultado de esa dinámica y que predispone a la atracción de ciertos hechos en la vida, como agruparse con cierta característica de personas y atraer ciertos tipo de experiencias, que a su ves pueden influenciar negativamente o positivamente, según la calidad de este clima en que interviene la voluntad personal.

En términos generales podemos decir que intervienen en el origen de las condiciones que desencadenan un trastorno de personalidad, los siguientes factores :
· Temperamento de riesgo - Con influencia de la herencia genética, ver Chess - Nueva York (New York Longitudinal Study ) Expresado por la calidad negativa del humor, perseverancia débil, adaptabilidad pobre, distraibilidad fuerte, reacciones emocionales intensas, nivel elevado de actividad, retraimiento social.
· La influencia de traumas – Experiencias traumáticas vividas que posteriormente por ciertas situaciones de la vida cotidiana puedan asociarse internamente a los hechos generadores del trauma, apareciendo irrupciones inconscientes como síntomas postraumáticos.
·    Influencias del aprendizaje  - Experiencias y respuestas aprendidas dentro de  un hogar disfuncional.
·   Influencias externas del aprendizaje social  - Experiencias fuera del ámbito familiar, aprendizajes en la socialización con otros en la juventud en combinación con ausencias familiares.
Todos estos factores pueden combinarse de la forma adecuada para desencadenar un trastorno de personalidad. Algo que es realmente necesario de analizar es la influencia del ambiente familiar y las influencias externas del aprendizaje social, por el hecho de que existe en la actualidad  gran cantidad de jóvenes y niños que se están criando en ambientes disfuncionales y bajo la influencia social de subculturas de pandillas, siendo en la actualidad y en el futuro un problema social que puede asumir relevancia en la generación de condiciones que generen patologías psíquicas.
En una investigación realizada por la Universidad de Tamaulipas en México se encontró que la mayoría de los pacientes que padecían un trastorno de la personalidad tenían antecedentes de violencia familiar más que influencia de aspectos temperamentales o genéticos. En la actualidad Las familias, pasan muy poco tiempo juntas y se le da más importancia a lo material que al desarrollo del equilibrio emocional.

La educación emocional es algo que se está perdiendo. En muchos casos las personas crecen sin sentir que se les quiere, que se les acepta tan solo por ser ellos mismos, en muchos ámbitos e inclusive el familiar se sienten rechazados, incomprendidos y carecen de una comunicación adecuada con sus familiares directos, muchas veces sumergidos en sus propios conflictos o en dilemas de pareja sin resolución, toda eso genera ansiedad y angustia en el niño y puede generar ira, conspirando así contra el equilibrio emocional y con el desarrollo de la capacidad de autocontrol.
Por lo tanto el origen de los trastornos de personalidad es lo expuesto en las primeras líneas de este documento, una red compleja en donde intervienen muchas variables que inciden o desencadenan el fenómeno, en donde intervienen factores genéticos constitucionales, familiares y ambientales e impactos por experiencias traumáticas.

También un trastorno de personalidad puede presentarse como complementario a alguna patología neurológica que se constituye en el síntoma previo al desencadenamiento de esa patología, siendo el diagnostico diferencial y la correcta evaluación psiquiátrica de suma importancia.

H
ay que considerar que las situaciones límite vividas a toda edad y etapa de la vida pueden generar traumas que traen síntomas posteriores por estrés.  Posteriormente situaciones de la vida cotidiana pueden asociarse internamente a los hechos generadores del trauma y posibilitar irrupciones inconscientes relacionadas a los hechos traumáticos. En síntesis por esa asociación, situaciones nuevas pueden disparar los síntomas postraumáticos y condicionar a que la personalidad sea vulnerable.
A través de este mecanismo pueden surgir Ira, desconfianza, aislamiento, violencia, impulsividad, autodestructividad, desregulación emocional, hiperemotividad, arrogancia, inflexibilidad, ansiedad y depresión que si se establecen como patrones permanentes que se apartan acusadamente de las expectativas de la cultura, alteran la conducta y el desenvolvimiento personal con resultados que producen deterioro social significativo,  pueden crear condiciones para que se desencadenen trastornos de personalidad. Por ejemplo muchas personas con trastorno limite de la personalidad han sufrido maltrato y abusos en la niñez.

No se puede afirmar que exista una causa lineal única que sea el origen de los trastornos de personalidad, sino que su causa de origen puede venir, como en todas las enfermedades mentales, de la influencia de un factor predominante y otros factores que al estar presentes ayudan a que la enfermedad se desencadene. 



Información obtenida de Christian Chaler.


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